Casus Belli – Reseña


Casus Belli IV (2023), 233-237
Recibido: 08/05/2023 - Aceptado: 06/06/2023

 

Villagra, Víctor M., Camber misión cumplida,

Buenos Aires, grupo argentinidad, Historia, 2020.

Juan Manuel Pan Santi

Universidad Nacional de la Defensa

 

No podemos negar que los libros sobre la guerra de Malvinas son, para los argentinos, libros de gran porte sentimental y que se deben conocer. La guerra de Malvinas fue el último conflicto convencional en el mundo, y los relatos de quienes han vivido esas situaciones bélicas son un aporte sin igual a la historia argentina.

 

 

El título del libro nos refiere al combate dado en la península de Camber por parte del BICO (Batallón de Comando y Apoyo Logístico) de la Infantería de Marina, dependiente del Comando de la Infantería de Marina (COIM). La propuesta del autor es brindar el relato de las vivencias como soldado conscripto, que forma parte de la sección de ametralladores 12,7 mm, desplegado al TOAS (Teatro de Operaciones del Atlántico Sur), la cual dependía del BIM 5 (Batallón de Infantería de Marina) que fuera divida en los diferentes sectores a defender.

El libro cuenta con dieciocho capítulos y doce anexos, los cuales se ordenan, cronológicamente, desde su incorporación como soldado conscripto hasta su regreso y la posterior vivencia de la posguerra. Es un relato, en primera persona, de un autor que no se caracteriza por ser un escritor de libros, sino alguien que quería dejar sus memorias de los días vividos en las posiciones, su experiencia personal y los vaivenes que tuvo que superar, tanto en el combate, como en la recepción de la vida cotidiana al regresar de las islas. Incluye fotografías únicas de las fuentes primarias que lo respaldan durante el desarrollo de sus capítulos, así como gráficos de los relatos del autor.

Los dos primeros capítulos nos relatan sobre su incorporación como soldado conscripto y su acercamiento a la Infantería de Marina. Sus primeros pasos en las instrucciones militares y la designación del nuevo armamento que les tocaría emplear en las Islas, dándonos a conocer cómo se forma un Infante de Marina y el porqué de su tan singular espíritu de cuerpo. La relación con sus primeros superiores y como uno de ellos marcaría su vida de soldado para siempre. Y, por último, la despedida de sus familiares previo al despliegue a Malvinas.

En los capítulos tres y cuatro, el autor nos traslada a las islas, al arribo, a los primeros reconocimientos del terreno, al nuevo ambiente geográfico en el cual se desarrollarían las acciones tácticas propias de los combates de Malvinas, a la preparación inicial de las posiciones que les tocaría cubrir y los primeros vestigios e incertidumbres propias del encuentro con el adversario. Son capítulos únicos, ya que las vivencias desde su posición complementan lo que conocemos sobre la guerra, completan los panoramas de los combates que se desarrollaron y se entrelazan con las demás vivencias de los protagonistas de las diferentes Unidades que combatieron en el Atlántico Sur.

En los capítulos cinco y seis, se desarrollan las primeras acciones, somos llevados al nivel táctico, el nivel de combate por excelencia. El dispositivo del elemento, las distancias entre las posiciones, el comando y control de la operación. Nos da a conocer con quienes compartía su posición, lo cual nos permite tener mayores datos de los protagonistas, algunos tal vez inéditos para muchos. Nos habla de su desempeño como soldado conscripto en su rol de combate de abastecedor, la vida en la posición y las primeras reacciones ante las adversidades, detallando anécdotas propias de sus nerviosismos y del estrés de combate. Llegamos así, al primero de mayo, los bombardeos; allí nos describe el autor las reacciones, el choque con la realidad de la guerra, que hasta ese momento se basaba en los supuestos de cómo sería, y ahora se convertía en realidad. Nos ubica en las posiciones constantemente bombardeadas, no solo por buques sino también por ataques aéreos, las alertas que se empleaban y la incertidumbre propia del combate. Allí llega el primer golpe moral, la noticia del hundimiento del Crucero ARA General Belgrano, nos plantea la nueva rutina y nos enseña como su grupo humano se mantiene firme en base a los objetivos personales que se autoimponen.

En el capítulo siete se nos presenta una situación un tanto anecdótica como así también de dolor, su choque con un superior, y como la mala interpretación de la situación produce un efecto negativo en la tropa, lo que a los lectores les puede denotar un sabor amargo durante el relato.

El capítulo ocho es un capítulo puramente anecdótico y muy personal del autor, sin tanta relación con el combate ni con las acciones tácticas, sino con uno de esos momentos en el que su mente busca en que aferrarse para no perder la voluntad de vencer y que le sirve de gran apoyo psicológico, ante las situaciones que está viviendo.

Ya el capítulo nueve nos escabulle en lo que el autor menciona como el capítulo más impactante de su vida, el combate desde su posición. El contacto con elementos ingleses, la necesidad de informar la situación y tomar acciones que traían grandes implicancias tácticas, tales como velar la posición. El combate nocturno desde la posición de Camber es plasmada en gráficos y esquicios, la cual nutre de buena información para comprender el dispositivo y adentrarse en la realidad que el autor estaba viviendo.

Del capítulo diez al doce, nos relata la rendición, sus apreciaciones y acciones realizadas hasta su traslado al campo de prisioneros. El trato como prisionero, y el inicio de su traslado hasta el rompehielos Almirante Irizar, devenido en buque hospital durante el conflicto.

Durante los siguientes capítulos, del trece al dieciséis, nos lleva a su retorno a la vida cotidiana. Su sentimiento de dolor al regresar a la labor diaria de soldado conscripto, su día a día hasta llegar su momento de la baja y la posterior posguerra. Su lucha constante por reinsertarse en el ámbito laboral y como la fundación “Voluntarias por la Patria”[1] le abrió las puertas para lograrlo. Estos capítulos nos muestran material inédito de fotografías.

Los capítulos diecisiete y dieciocho nos embarcan en sus charlas en instituciones, la enseñanza que brindó en las escuelas secundarias y como fue gestando el tan ansiado regreso a las Islas junto a otros veteranos de guerra. El autor nos inserta en ese viaje de regreso a lo que fuera su posición durante el conflicto. Nos carga de emoción al detallar el cierre de su ciclo de combatiente, y como pudo, junto a los otros veteranos de las diferentes fuerzas, realizar el recorrido de los lugares que años atrás los marcaron para siempre.

Los posteriores anexos son relatos de personas muy cercanas al autor, combatientes, amigos y su madre. Dos de los tres integrantes de su posición relatan sus vivencias, complementando el relato del autor. El relato de su madre es acompañado con las imágenes de las cartas escritas por el autor durante el conflicto. Siendo estos relatos un complemento significativo para la causa Malvinas y un aporte significativo para aquellos que estudian la función de bienestar en el campo de la conducción de personal.

En conclusión, a través del relato sobre los vaivenes desde sus inicios en la vida militar como soldado conscripto, hasta su inserción en la vida civil nuevamente, el autor nos muestra los sucesos que le tocaron vivir desde su puesto, aportando con sus fuentes inéditas detalles para el estudio de la causa Malvinas.

Este libro es un relato que le sirve a aquellos interesados en la causa Malvinas. Es, en un punto, la descripción desde la posición que le tocó ocupar, como lo menciona otro autor, Humberto Simón Henríquez, en su libro El combate de las 12,7 en Malvinas (Argentinidad, 2014), y quien fuera el suboficial que instruyó al autor en el desempeño de su rol. Entrelazar el relato de ambos, quienes no compartieron el mismo sector de la defensa que les todo ocupar, pero pertenecían al mismo elemento que fue dividido en tres partes, es una de las mayores riquezas que nos deja Villagra en su libro.

Para aquellos lectores interesados en el aspecto táctico de los combates durante la guerra de Malvinas, hallaran los aspectos más relevantes entre los capítulos cinco y nueve, donde se desarrolla el combate desde su posición.

Para los lectores más interesados en lo sucedido en la posguerra, y como fue el sufrimiento de los veteranos de guerra hasta que, finalmente, aquellos que pudieron se reinsertaron en la sociedad y siguieron adelante, encontraran que los capítulos trece a dieciséis son los que brindan la mayor información respecto a este tema.

Lo que hay que dejar en claro es que en ningún libro relacionado con la Guerra de Malvinas, y que haya sido escrito por sus protagonistas, se habla sobre lo mismo. Pueden hablar del mismo combate, de la misma campaña, pero cada vivencia es única y singular. El autor, como mencionara al inicio, no es un escritor profesional, por lo tanto, hay momentos en los que la lectura se torna inconsistente o cambia de enfoque, pero esto se entiende claramente, en tanto que lo que quiere expresar es como se sentía, lo que significaba para él, tal vez, el entonar una canción mientras esperaba apostado en la turba malvinense con tantos miedos y temores, como adrenalina y espíritu de combate.

El autor es uno de nuestros veteranos de combate, perteneciente a la infantería de marina, quien a través de la escritura nos deja, para las generaciones futuras, su historia, su momento de combate, su formación y su entrega. Nos enseña que un civil, con la motivación correcta, con la instrucción militar necesaria, y conformando una sinergia particular junto a sus camaradas, logra ser resiliente ante las adversidades del combate y nos permite, a través de sus fotos y gráficos, completar aún más el conocimiento de lo que fue nuestra gesta de Malvinas.

 


 

1 Fundación Voluntarias por la Patria: fundación creada por Sofía Laferrere de Pinedo, una vez iniciado el conflicto, para prestar ayuda a los soldados heridos y ex combatientes.